Después de analizar los sueños de muchos pacientes, Jung llegó a la conclusión de que ciertas imágenes aparecen en todas las culturas como símbolos, por lo que forman parte de lo que él denominaba el subconsciente colectivo, basado en las experiencias y recuerdos de nuestros ancestros. Imágenes como la de verse perseguido por un enorme monstruo, el ansia por la seguridad, o los peligros que acechan en la oscuridad, los experimenta en sueños gente de todo el mundo, de modo que se trata de imágenes universales.
A estas imágenes universales Jung las denominó «arquetipos» que aparecen en el subconsciente de millones de personas. Existe el ánima o principio femenino, que se puede manifestar como diosa, reina, princesa o bruja: y el animus o principio masculino, que podría ser dios, rey, príncipe, hechicero o el mismo demonio. Estas figuras simbolizan nuestra imagen de fo masculino y lo femenino, y podrían ser representativas de un aspecto de nosotros mismos, de nuestro padre o nuestra madre, o de una persona amada.
Otros arquetipos incluyen la sombra, la personificación de sentimientos de culpa o temor, en particular de nuestros deseos inconscientes u ocultos.
0 comentarios:
Publicar un comentario